¿Qué beneficios tiene saber quién es el receptor de la comunicación de nuestro negocio? Sin duda, entender a quien le hablamos reduce el riesgo de elaborar mensajes muy generales, que no logren el impacto que deseamos. El perfil del cliente ideal ayuda a dirigir conscientemente la comunicación de nuestro negocio a un tipo de persona determinada, como si estuviésemos entablando una conversación con ella.

La comunicación para todos no tiene impacto

Desde que el Inbound Marketing o el nuevo marketing cambió las reglas de juego y propuso  acercarse a los clientes potenciales de manera amigable, no invasiva y dejando que sean ellos los que muestren interés por la marca, el contenido de valor pasó a ser la estrella de toda estrategia de comunicación.

Así, todos los mensajes de una marca están orientados a atraer la atención de personas con el objetivo de que consuman contenidos de su interés, para ir aprendiendo sobre la marca, saber qué esperar y sobre todo a confiar en ella.

De esta manera, se logra construir una comunidad en virtud de intereses en común. Por lo que finalmente, la venta ocurrirá como un desenlace natural de un proceso que involucró antes a dos personas: la marca y a su potencial cliente.

Conocer las necesidades, estilo de vida, intereses, y desafíos a los que se enfrenta el cliente hará que tanto los mensajes como toda la estrategia de comunicación, la de marketing y la de ventas se enfoque en atraerlo a tu negocio.

También, es esencial  destacar y dejar muy claro, qué es lo que ofreces en tu negocio, cuál es tu diferencial con respecto a la competencia y cuáles son los beneficios de comprar tus productos o trabajar con vos.

Una estrategia de contenido orientada al cliente ideal, te ayudará a lograr posicionamiento en un nicho determinado del mercado. De este modo, quienes buscan contenidos es porque se sienten interpelados con lo publicado  y están interesados en seguir los consejos de una marca a la que consideran "experta".

¿Quién es un cliente ideal?

Podemos definir al cliente ideal como aquel que:

1. Compra tus productos o servicios, feliz de la vida.

2. Paga sin regatear y piensa que el precio es justo, está conforme con el valor que recibe.

3. Soluciona un problema o cubre una necesidad con tu producto o servicio.

4. Te recomienda y te vuelve a comprar.

5. Último y no menos importante, es una persona con la que vos amas trabajar.

Tener en claro a quién deseamos atraer a nuestro negocio, nos permitirá diseñar una estrategia de contenido acorde, optimizar nuestras cuentas en redes sociales y conseguir clientes que necesitan nuestros productos y servicios.

¿Cómo armar el perfil del cliente ideal?

El perfil del cliente ideal debe tener como base una investigación:

• Si ya tenés un negocio funcionando podés aprovechar para hacer encuestas y averiguar cómo ayudar a tus clientes, entender sobre las expectativas con respecto a tu producto o servicio. Incluso podés investigar sobre la forma de hablar de tus clientes para poder llegar a ellos mejor, (algo muy útil si te dirigís a un segmento adolescente).

• Si estás empezando, podés crear una persona semi-ficticia con datos demográficos, patrones de comportamiento, motivaciones, objetivos y retos. Podes tomar datos de personas cercanas, amigos o familiares, o personas con las que te gustaría trabajar.

En los dos casos, podemos ir más lejos y pensar en un nombre para ese cliente, definir dónde vive y con quién; a qué se dedica, qué hace en sus ratos libres, cuáles son sus hobbies, dónde y cómo compra y cómo se relaciona con tu producto o servicio.

Lo prometido: 5 pasos para crear un perfil de cliente ideal para tu negocio:

PASO 1 

Definir cuál es el problema que soluciona tu producto o servicio.

PASO 2

Describir a la persona con la que vos amás trabajar y que sabes quedaría completamente satisfecha con tu producto o servicio.

Dale un nombre, definí su edad exacta, con quién vive, a qué se dedica, dónde trabaja, cuáles son sus estudios o en qué se capacita. 

PASO 3

¿Cuáles son sus comportamientos e intereses? Qué le preocupa, qué siente en relación a lo que vendes: cuáles son sus puntos de dolor y sus deseos. De qué manera podes resolver sus problemas con tu producto o servicio. Qué tiene en común con tu marca y con vos. Su cuadro emocional es importante porque sus necesidades serán el centro de información para armar tus mensajes.

Otros puntos de interés pueden ser:

¿Qué busca tu cliente ideal en Google?

¿Cuáles son los canales de comunicación que usa? 

¿A qué eventos suele ir?

¿Cuáles son sus gustos y aficiones?

PASO 4

¿Cuáles son sus hábitos de consumo? ¿Cómo éstos se relacionan con lo que vendes?

¿En qué le gusta invertir a tu cliente ideal y por qué?

¿Qué siente cuando está a punto de comprar o reservar tu producto o servicio?

¿Qué es lo que más le preocupa?

¿Qué le permite tomar una decisión de compra?

PASO 5

¿Cómo transforma/ mejora su vida después de trabajar con vos (en el caso de que vendas servicios) o después de comprar tu producto ?

De esta manera ya sabes:

• Cuáles son las características de tu cliente ideal: datos demográficos, socioeconómicos, de comportamiento y consumo.

Todo este conocimiento te guiará para saber sobre qué temas debes hablar, cómo podes llegar mejor a ese cliente ideal. La idea es que cuando lea un posteo, reciba un mail o vea un video sienta que el mensaje es para él o ella. Podrás llegar a la mente y al corazón de tu audiencia, ya que el contenido apropiado ayuda a las relación marca-usuario.

Como dueña de un negocio, este perfil te permite:

• Ajustar el contenido a tu cliente ideal.
  
• Construir el discurso de tu marca y hacerlo de manera coherente.
• Definir tu estilo, así tus lectores serán capaces de reconocerte y tu marca será familiar para ellos.
• Hacer que tu marca sea "encontrarle" online.
• Podrás crear contenido que emocione, ya que es el que más se comparte.

Seguramente, te estarás preguntando si un perfil de cliente ideal está limitando tu público objetivo. Y la respuesta es ¡NO!

Al dirigir todo tu esfuerzo de comunicación a personas que necesitan tus productos o servicios, estás ayudando a esas personas a encontrarte, a conocerte, a confiar en vos y en tu marca. Y por supuesto, que cuando estén listos o sea el momento adecuado, te compren.

¿Vas a armar el perfil de tu cliente ideal?